CAPÍTULO 5: Buenas nuevas


Mientras Buffy buscaba sus cosas Spike la observaba en silencio, vistiéndose también a su vez. Ninguno habló más desde que Buffy expresó su deseo de irse, ambos con muchas cosas en la cabeza por el momento. Spike, por su parte, experimentaba una mezcla de absoluto regocijo por haber llevado su “relación” con Buffy al siguiente nivel y de completo asombro por los hechos sucedidos esa noche, junto con el miedo que tan importante cambio entre ambos sobrellevaba. Spike hubiera dado lo que fuera en ese momento por saber lo que pasaba en la cabeza de la Cazadora.

‘Me está mirando, qué rayos le digo? “Lo siento Spike, pero esto fue un completo error que no volverá a suceder a pesar de que mi cuerpo lo pide a gritos, lo disfruté mucho pero somos totalmente diferentes aunque a veces no lo sienta así, y de paso me sentiría MUCHO mejor si dejaras de mirarme en este momento o de lo contrario voy a saltar sobre ti y mandar este estúpido monólogo mental al infierno…” Buen discurso Buffy, y dónde rayos fue a parar mi sostén?!’ Buffy encontró el objeto en cuestión y al verlo rasgado al medio e inservible lo tiró sobre un hombro con una blasfemia entre dientes. ‘Mi favorito… bueno, supongo que ahora que soy rica podré comprar miles mejores que éste’.

Recordando los tesoros, Buffy observó una vez más las hermosas joyas sonriendo al imaginar cómo irá a reaccionar Dawn al decírselo. Apartando su mirada, sus ojos buscaron los de Spike y viendo la incertidumbre en ellos se acercó a él con una expresión de quietud. Después de lo que había hecho, ser honesta con él era lo menos que podía hacer.

Al ver la calma en Buffy, Spike exhaló innecesariamente un leve suspiro de alivio. ‘Al menos ya no está tan deprimida, enojada puedo manejarla pero no sé qué hacer cuando está triste’ Buffy tomó sus manos y mirándolo a los ojos se dirigió a él en un tono amable. ‘No, por favor, no me apartes de ti Buffy, no hagas que me aleje de ti después de lo que acabamos de hacer…’ suplicó Spike para sí. Algo dentro de él le decía que no esperara buenas noticias.

“Spike… no sabes cuánto te agradezco lo que hiciste por mí esta noche, no sólo me has facilitado una solución a mis problemas sino también me brindaste consuelo de un modo… más que interesante.” Buffy bajó su mirada por unos instantes cuando sintió sus mejillas arder. Spike sonrió complacido, tal vez eran buenas noticias las que recibiría.

Luego de aclarar la garganta, Buffy continuó. “Sé que lo que hicimos significa mucho para ti, pero… lo siento… no puede suceder de nuevo”.

La sonrisa en el rostro de Spike se desvaneció, cerró sus ojos y tragó en seco. Sus temores se realizaron después de todo. Al abrirlos se dio cuenta que Buffy seguía hablando.

“No creo estar en condiciones para ofrecerte lo que deseas, ni mental ni sentimentalmente. Debes entender que estoy pasando por un momento muy difícil, en primer lugar debo aceptar a mis amigos una vez más… no sé si podré… todo está tan confuso con este sentimiento de vacío que tengo dentro desde que volví… ni siquiera sé si volveré a ser la misma algún día… ni siquiera sé si seré capaz de amar todavía…” Su voz se quebró al sentir un nudo en la garganta.

Spike sonrió y tomando las manos de Buffy las llevó a sus labios. Ojos cerrados, depositó todo su afecto en un beso firme y dulce a la vez sobre sus nudillos, los mismos que lo habían castigado tantas veces en el pasado.

“Buffy, estaré contigo no importa lo que pase, te ayudaré a superar esto y cualquier decisión que tomes lo entenderé. Pero por favor, no me apartes de ti, de verdad quiero ayudarte amor,” imploró con sus ojos.

Buffy sonrió y le dio un beso en la frente. ‘Dios, se ve tan tierno… Spike es tierno!?’ “No te preocupes, no planeo alejarte de nosotros. Dawn no se sentiría muy feliz al respecto”.

Spike le agradeció con un abrazo y decidió alegrar un poco el clima. “Bueno amor, ahora que eres millonaria, cómo piensas invertir tu fortuna?” Buffy rió en su hombro y se apartó para mirar los tesoros, como contemplando una difícil decisión.

“Creo que empezaré por un nuevo sostén.”


*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*

Minutos más tarde Buffy entraba a su casa y silenciosamente se dirigió al baño a tomarse una ducha para luego acostarse. Luego de asearse se puso su ropa de dormir y colocó debajo de su cama el souvenir que tomó de la cueva. No podía esperar a decírselo a Dawn y los demás.

Spike exhaló el humo de su cigarrillo al frío de la noche y luego de que la luz del cuarto de su Cazadora se apagara, dio media vuelta y se sumergió en la oscuridad a la que pertenecía, sus pensamientos centrados en el contenido de ese cuarto.


*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*

Buffy despertó con el aroma del desayuno. Sus sentidos fueron de a poco tomando vida y con un gruñido se levantó de la cama para dirigirse al baño y refrescarse. Levantarse temprano, porqué tenía que hacerlo? Ah, si. Deberes de adulto. ‘Me gustaría ser un gato… tal vez iba a reencarnar en uno’ pensó de la nada. Mientras se cepillaba los dientes se observó a sí misma en el espejo durante un largo tiempo, una costumbre que adoptó desde que volvió. Sus ojos se agrandaron cuando detuvo su mirada en el par de puntos rojos adornando su cuello. Sus dedos los recorrieron lentamente y su cuerpo se estremeció por la sensibilidad que la marca aún poseía. Buffy cerró los ojos e invocó las imágenes de la noche anterior, sus manos comenzando a recorrer las partes donde el contacto era necesario. Pero el sonido de voces en la casa la despertaron de su involuntaria fantasía y con renuencia se enfrentó a la fría realidad. Ocultar la marca era una penosa pero necesaria obligación por el momento, así que se decidió por un sweater de cuello alto, jeans y sus botas negras favoritas.

Cuando estaba por dirigirse hacia la cocina, recordó el souvenir y luego de recobrarlo bajó las escaleras con una sonrisa. Dawn, Willow, Tara y Giles ya estaban allí, y Buffy sintió de inmediato la tensión en el aire. Casi había olvidado la discusión de la noche anterior entre Willow y Giles. Dawn, sin embargo, parecía inconsciente de ello y sonrió cuando vio a Buffy llegar.

“Buenos días! Dormiste bien? Sin pesadillas ni monstruos o algo parecido?” dijo Dawn en tono de broma pero con un leve sentido en serio. Sabía que su hermana no estaba durmiendo bien. Buffy le brindó una sonrisa asegurándole lo contrario, no podía esperar a darle las buenas nuevas.

“Buenos días a todos, dormí muy bien de hecho,” ‘gracias de nuevo Spike’ “y quería comentarles de algo que descubrí anoche.”

Tara se apartó de los platos que estaba lavando, secó sus manos y se prestó a poner atención. Giles y Willow cesaron cualquier batalla silenciosa que estaban desatando y enfocaron su atención en Buffy. Sólo en ese momento se dieron cuenta que llevaba una mano escondida detrás de la espalda.

“¿Descubriste algo al patrullar? Fuiste a patrullar, no? Supusimos que sí porque no regresaste hasta muy tarde. ¿Noche dura?” preguntó Willow.

Buffy se sonrojó al recordar cuán “dura” había sido la noche anterior, pero apartó esos pensamientos a favor del asunto en cuestión. “Eh, no, no fui a patrullar. Spike apareció anoche, nos pusimos a hablar de varias cosas, y ya saben, el tiempo pasó volando.”

Viendo la expresión en todos, Giles no pudo evitar preguntar. “Buffy, disculpa que te interrumpa, pero desde cuándo te has vuelto compañera de charlas con Spike? Pensé que apenas lo tolerabas.” Sus palabras fueron apoyadas por el resto, obviamente pensando lo mismo.

Buffy se sonrojó aún más. ‘Si reaccionan así solamente por haber charlado con él, no quiero saber qué pensarán después de lo que hicimos’. Un sentimiento de decepción y tristeza se deslizó por su ser. ‘Nunca aceptarán a Spike, no les importa todo lo que hizo por mí y Dawn’. Su corazón dolió por él y apretó el souvenir con fuerza.

“Hablo con él porque me escucha sin juzgarme ni esperar nada de mí y cuando necesito espacio y tranquilidad él lo entiende y no me presiona por los motivos” dijo Buffy con voz calmada pero firme. Los habitantes del cuarto bajaron la mirada en silencio. Buffy exhaló resignada. ‘Buenas nuevas, recuerdas?’

“De todos modos probé que me sirvió de mucho hacerlo porque gracias a él encontré la solución a nuestros problemas de dinero.” Todos la miraron entonces y Dawn sonrió.

“¿De veras? ¿Te consiguió trabajo o alguna misión con recompensa?”

“Algo mucho mejor”. Luego de una pausa dramática extendió la mano que escondía detrás de la espalda. “Ta-dáan!”

Dawn saltó de su asiento en deleite. “Woooowww! Es precioso!!” Willow y Tara se acercaron a observar el objeto con total asombro y apreciación.

“Buffy, es hermoso! Mira como brilla!” exclamó Willow entusiasmada.

“Y la forma de la piedra es perfecta! ¿No le parece señor Giles?” agregó Tara.

Giles se ajustó los lentes para estimar mejor la joya. “Er… me permites?” le preguntó a Buffy. Ésta se lo cedió con una sonrisa.

“Mmmh… por su peso, color y textura diría que es auténtico… ¿Dónde lo conseguiste Buffy? O mejor dicho, dónde lo consiguió Spike? ¿No lo robó verdad? Supongo que no lo permitirías, no importa cuán graves sean tus prob--” Buffy rió entonces, habiendo pensado exactamente lo mismo al principio. Así que le dijo al Vigilante lo que Spike le había respondido en esa ocasión.

“Tranquilízate Giles, tu conciencia está limpia. Es parte del tesoro de Amara.”

Giles agrandó los ojos en asombro. “¿El tesoro de Amara? Pero es una leyenda, cómo es posible que lo hayas encont…” La comprensión cayó sobre él y miró el objeto una vez más con una extraña expresión en el rostro.

“Spike encontró el anillo de Amara pero conservó el tesoro. Todo este tiempo lo conservó y anoche decidió darte parte de él, no?” Dijo Giles más en confirmación que en pregunta.

“No, de hecho me regaló TODO el tesoro. Los cientos de joyas y piezas de oro” dijo Buffy complacida.

Un silencio reinó en el lugar al mirarla todos estupefactos.

“C-c-cientos?” dijeron Dawn, Willow y Tara con dificultad. Buffy asintió y oprimió los labios reprimiendo la risa al ver las expresiones pasmadas de todos.

Dawn fue la primera en gritar como una chiquilla y el resto de las mujeres la acompañó en sus exclamaciones acerca de su nueva fortuna. Giles se limitó palmear tímidamente el hombro de Buffy en felicitación.

“Me alegra mucho que te hayas librado de este problema Buffy, sin duda es una sorpresa el que la solución haya venido de parte de Spike, pero a esta altura poco me sorprende ya de ese vampiro” dijo Giles con humor. ‘Debo recordar tener un par de palabras con ese demonio, ver cuáles son sus intenciones ahora que Buffy volvió.’ pensó por otra parte.

“Gracias Giles, en otra ocasión te llevaré a la cueva donde están los tesoros por si hay algo que te interese, histórico o material” bromeó Buffy.

Giles frunció el ceño. “¿Fuiste a la cueva?”

Buffy tragó en seco.

“Supuse que él te mostró esto solamente, no que te llevó a la cueva misma. Supe que está muy escondida en lo profundo de la tierra.” Buffy definitivamente sintió sus mejillas arder ahora. “¿Es allí donde estuviste toda la noche?”

Buffy abrió la boca para responder pero Dawn se le adelantó y tomó la joya de las manos de Giles, exclamando “Buffy! Puedo quedármelo? Por favooooor! Siiii?”

Buffy exhaló el aliento que estaba reprimiendo en alivio y prendiendo velas imaginarias a Dawn se dirigió a su hermana con una gran sonrisa. “¡Por supuesto que es tuyo! ¿Quieres que te lo ponga?” Dawn chilló su aprobación y dándose vuelta se levantó el cabello para que Buffy cierre el valioso collar de diamantes en su cuello. Willow y Tara se mostraron maravilladas y llevaron a Dawn fuera de la casa para apreciar mejor en el sol el brillo del enorme rubí rodeado de topacios y zafiros que conformaban el centro del collar.

Buffy no lo pensó dos veces y siguió a los demás afuera con tal de no seguir la conversación iniciada por su Vigilante.





You must login (register) to review.