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CAPÍTULO 6: Secretos que duelen


Luego de que unas muy entusiasmadas Dawn, Tara y Willow se marcharan a sus respectivas clases esa mañana Buffy y Giles decidieron ir a la Caja Mágica para transmitir las buenas nuevas a Xander y Anya, el primero se encontraba ya en el lugar por tener el día libre.

Como era de esperar, ambos preguntaron de dónde robó Spike la joya y si Buffy hizo algo al respecto. Giles rió y Buffy forzó una sonrisa por su bien. ‘Desconfían de Spike después de lo que me hicieron pasar… “Hey amigos, no hay porqué ponerse así, después de todo qué es tratar de matarme --algo de todos los días-- comparado con tu peor pesadilla: ser enterrada viva!’ Buffy reprimió una expresión que reflejara sus pensamientos y en su lugar fingió entretenerse con la broma.

“Si, dímelo a mí, Giles y yo pensamos lo mismo al principio pero quién iba a pensar que Spike era capaz de hacer algo tan… anti-Spike, jaja!” bromeó Buffy a su vez.

“Tal vez Spike está sintiendo su edad finalmente, o quién sabe, tal vez sólo lo hace para meterse en tus pantalones. Yo que tú tendría cuidado Buffy, Spike podría estar planeando algo” advirtió Xander.

“Es verdad Buffy, yo en tu lugar saltaría sobre Spike sin dudarlo…” aseguró Anya apreciando el collar en sus manos. La baba prácticamente asomaba en sus labios. “Después de todo él es muy atractivo y te obsequió una gran cantidad de dinero… por supuesto no quiero decir que seas una prostituta, solamente que yo en tu lugar ya estaría--” Anya se detuvo cuando vio las expresiones en los demás. “¿Qué?”

Xander tuvo la sutileza de no estrangular a su prometida. “Anya, cariño, Buffy no saltará sobre Spike por dinero ni mucho menos, así que deja de asumir eso, y desde cuándo te atrae el Capitán Peróxido?! Vampiro, recuerdas?!” enfatizó firmemente con una voz que, sin bien calmada, no lograba esconder el tono de celos.

Anya giró los ojos en irritación. ‘Hombres…’ “Hombres... no soy ciega Xander, cualquiera en su sano juicio encontraría atractivo a Spike, con ese cuerpo y esos ojos, además huele muy bien… y que tiene que sea vampiro? Para tu información el sexo con vampiros resulta en ocasiones más estimulante que con humanos, tienen más estamina, más potencia y algunos encuentran la mordida extremadamente excitante, sin mencionar los sonidos que hacen cuando--”

“ANYA!! SUFICIENTE!! Creo que dejaste tu punto MUY claro, muchas gracias!!” exclamó Xander, rojo de pies a cabeza y con una mano en la boca de su a-punto-de-dejar-de-ser prometida. Anya sólo lo miró con el ceño fruncido. Buffy y Giles no estaban mejor que Xander, el segundo mirando para cualquier parte excepto los presentes y la primera con los ojos desorbitados ante las palabras del ex-demonio.

“Er, uh… bueno, creo que si Anya terminó de… aclarar cualquier punto de vista acerca de, er… lo que sea que quiso aclarar, puede entonces ayudar a Buffy con algunos consejos acerca de los procedimientos en casos como éste, no te parece Buffy?” habló por fin Giles con un poco de dificultad.

Buffy todavía estaba mirando a Anya y procesando sus palabras, imágenes de la noche anterior danzando en su mente cuando la voz de Giles la trajo al presente. “¿Ehh? Ah si! Anya, me ayudarías con los números y demás, siendo tú tan buena y… todo eso?” balbuceó abruptamente Buffy aún sonrojada y forzando los hormigueos recorriendo su cuerpo a detenerse. “Voy a recompensarte muy bien a cambio de tus servicios, qué dices?”

Los ojos de Anya brillaron y esbozando una gran sonrisa aceptó la propuesta, completamente inconsciente de los efectos que había tenido su pequeño discurso.

“Por supuesto Buffy! Cualquier cosa que necesites no dudes en consultarme, si quieres te puedo hacer esquemas y planes de inversión detallados y muy beneficiosos. Pero primero debo ver los bienes para saber exactamente a cuánto dinero nos estamos refiriendo aquí.”

Buffy sintió su corazón dar un par de saltos ante la idea de ver a Spike nuevamente. ‘Bueno, que esperabas? Que lo evitarías para siempre?’ “Por supuesto Anya! Me aseguraré de que Spike nos muestre el camino esta noche, si te parece bien”.

“También pienso que es una buena idea, voy a aprovechar la ocasión para tomar algunas notas del mítico tesoro de Amara para los registros” agregó Giles.

“Dawn también querrá ir, no sé si sea buena idea…” dijo Buffy.

“Ah, no te preocupes Buffy, todos estaremos ahí y de paso vigilaremos al Capitán Peróxido por las dudas…” dijo Xander mirando a Anya deliberadamente. Ésta le devolvió la mirada con un signo de interrogación en el rostro. ¿Acaso estaba celoso? Anya no comprendía, Xander era el único para ella. Suponía que él ya lo tenía asumido.

“De acuerdo, a qué hora quieres ir esta noche Anya?” interrumpió Buffy.

“Después de cerrar estaría bien, gracias” dijo Anya sin apartar su mirada de Xander, quien dejó el asunto para después, sin tantos testigos de su ego ofendido por las palabras de su prometida.

“Bien! ¿Qué les parece si almorzamos ahora? Yo estoy de antojo por comida china, qué dices Xander?” dijo entusiasmada Buffy con intención de disipar el aire de tensión entre la pareja. Tuvo el efecto deseado, Xander se alegró al momento de comida mencionada. Inmediatamente se pusieron a hablar de gustos y opciones, Buffy tratando de calmar las mariposas que pronosticaban el encuentro de esa noche con cierto vampiro.


*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*


La noche cayó y los habitantes de la casa Summers se dirigieron a la Caja Mágica con bolsos para transportar parte de los bienes de la cueva. Decidieron no sacar demasiado por riesgo a perderlo en el mundo exterior, habiendo acordado que la cueva es el lugar más seguro después de cientos de años.

Después de cerrar el local, los Scoobies se dirigieron al cementerio con los ánimos en alto y comentando los planes futuros para el oro. Dawn estaba particularmente exaltada, no solamente por ver los tesoros sino también porque Buffy le permitió ir con ellos después de mucho insistir. Su hermana finalmente se rindió y luego de un largo sermón acerca de cuidados y advertencias le permitió ir. El no tener escuela al día siguiente fue un factor decisivo.

Al llegar a la cripta de Spike, Buffy se adelantó al grupo y se dirigió a ellos. “Me gustaría hablar primero con él para ponerlo al tanto de lo que vamos a hacer, está bien?”

El grupo accedió y Buffy entró al lugar para encontrar al vampiro mirando televisión en su sillón favorito. Cerrando la puerta se dirigió a él con el cuerpo casi vibrando por los hormigueos recorriéndolo. Buffy solamente rezaba porque Spike no se diera cuenta. ‘Si, claro, un vampiro que no note la sangre a flor de piel, cuáles son las posibilidades??’

Spike había percibido a la Cazadora acercarse a la cripta momentos antes y al entrar sintió su esencia invadir el interior del lugar. El vampiro dejó sus párpados caer e inhalando profundamente permitió al aroma regarse por sus sentidos. 'Mmmhh, vainilla, feminidad y poder'. Luego de unos momentos vio a Buffy observarlo con ojos curiosos.

“Buenas noches, amor” murmuró Spike en sotto voce y poniéndose de pie frente a ella con gracia felina. Levantando una mano recorrió con un dedo el costado de su mejilla.

Buffy tragó en seco, el contacto amenazando su autocontrol. Spike rodeó su rostro con la mano y se inclinó hacia sus labios. Buffy exhaló un pequeño suspiro y cerró su ojos en anticipación. Sus labios se rozaron levemente--

KNOCK KNOCK!!!

Vampiro y Cazadora se separaron en sobresalto, Spike murmurando un expletivo y Buffy recobrando no del todo la calma. Luego de un largo y discreto respiro se dirigió a Spike.

“Los demás están afuera esperando por nosotros, debemos irnos” dijo Buffy con un poco de dificultad.

“Esperando qué, amor? Les dijiste lo que hicimos y vienen a vengarte?” dijo Spike maliciosamente.

“Si claro, les conté todo y ahora están afuera con palos y antorchas” dijo Buffy frustrada y girando los ojos.

Spike no pudo evitar sentirse herido por la noticia. En el fondo sabía que Buffy no querría que lo suyo se supiera, pero no por eso dolía menos. En su lugar puso un aire de irritación y se dirigió a ella cuidando que su aflicción no se trepara en su voz.

“¿Sarcástica, eh? ¿Qué sucede amor, perdiste el sentido del humor junto con la inhibición anoche? ¿O tienes tanta vergüenza de lo que hicimos que ni siquiera puedes soportar una broma?” exclamó Spike cínicamente.

Buffy suspiró exasperada y decidió calmar sus nervios. Spike siempre tuvo la maravillosa cualidad de irritarla sin el más mínimo esfuerzo. La pena en su voz no escapó a sus oídos y su corazón se contrajo.

“Spike, no es que esté avergonzada de lo que hicimos, sabes que tuvo un significado especial para mí y no quiero que pienses lo contrario,” dijo Buffy con voz calmada y segura. “Pero debes entender que ese significado se manchará si mis amigos se enteraran. Ellos no saben por lo que estoy pasando y jamás entenderán lo que tuvimos.”

Buffy esperó a que Spike absorbiera sus palabras y al ver su aceptación prosiguió. “Ahora, ellos están afuera porque les dije que le mostraríamos la cueva, incluso Dawn está allí y no quiero ponerla en peligro más tiempo. ¿Podemos irnos ya?”

Spike asintió resignado y acompañó a Buffy a la puerta, por dentro emocionado ante el hecho de que Buffy no lo había apartado de su vida después de todo.

Cuando salieron Spike se vio lleno de una muy entusiasmada Dawn prendida por su cuello y exclamándole las gracias por lo que había hecho. Spike, emocionado por su alegría la abrazó a su vez, Buffy observando la escena con ternura en los ojos, el resto con emociones mezcladas. Hasta que Xander dio una palmada y frotando sus manos en preparación instó a los presentes a continuar la marcha.

Fue una lenta caminata por el oscuro túnel debido al número de personas y a la escalera que habían traído para la ocasión. Las manos de Spike anhelaban el contacto con su Cazadora, pero ni siquiera podía tomarla de la mano con los Scoobies allí valiéndose de linternas. Buffy podía aún sentir los constantes cosquilleos en el estómago todo el trayecto por los túneles, contentándose con tomar a Spike de la manga de su saco como excusa para mantener el equilibrio.

Cuando llegaron a la cueva Spike bajó primero para recibir la escalera. Las velas de la noche anterior aún se encontraban allí, con poca cera ya para el camino. En su lugar se encendieron algunas viejas antorchas adheridas a las paredes.

La expresión de todos al ver los tesoros fue idéntico en las mujeres y Xander, mientras que Giles los miraba con una mezcla de admiración y escrutinio. Inmediatamente Anya comenzó a evaluar los bienes y haciendo números mentales fue escribiendo en su cuaderno precios y cálculos. Las demás se encargaron de probarse cuanta joya encontraran y viendo quién soportaba más peso. Xander admiraba las armas y piezas de oro, desenterrando los del fondo para ver qué más de interesante encontraba.

Buffy observaba a sus amigos con una gran sonrisa. Spike la observaba a ella y su hermosa sonrisa.

“Dawn está tan contenta…” murmuró Buffy, hasta que la sonrisa en sus labios se desvaneció y sus ojos se agrandaron cuando vio lo que Dawn había encontrado entre dos barriles de monedas de oro. A una velocidad increíble fue a su lado y tomó el objeto de sus manos escondiéndolo en el bolsillo de su chaqueta con el rostro rojo de vergüenza y horror, sus ojos suplicando que no diga nada. Dawn la miró al principio con pura curiosidad y cuestionamiento hasta que al ver las mejillas sonrojadas de su hermana y la sonrisa maliciosa del vampiro al otro extremo de la cueva, cayó en cuenta de lo sucedido y sus ojos se abrieron cómicamente.

“OH… DIOS… MIO!!” exclamó Dawn entrando en un ataque de risas que alertó al resto de los presentes. Buffy rió con ella de puro nervios mientras trataba de calmarse tanto ella como a su hermana, mentalmente rezando no tener que matarla a cambio de su silencio…





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